Shuttle es una empresa fundada en 1983 en Taiwán, está especializada en el desarrollo y la producción de innovadores y elegantes mini PC’s además de NAS entre otros productos. Shuttle se orienta además a las necesidades del consumidor final, con una electrónica de ocio fácil de usar para el hogar digital.
En esta ocasión tenemos el placer de analizar el Shuttle Omninas KD20, un NAS con la posibilidad de poder albergar hasta dos discos duros. Con una máxima capacidad de 4 TB por unidad, es decir 8 TB en total. Destaca por la utilización de materiales de alta calidad, además de mantener un diseño completamente agradable visualmente.
Referente al empaquetado no puedo decir nada negativo, todo lo contrario si por algo destaca Shuttle es por cuidar los pequeños detalles. La caja tiene un diseño minimalista a la par que profesional, definiendo en la parte delantera las características más llamativas del producto.
Disponemos de un asa muy práctica para el transporte, que aporta seguridad al empaquetado.
Dentro del empaquetado nos encontramos con una pequeña caja que contendrá todo lo necesario para empezar a funcionar, entre lo que se incluye: un cable de red Ethernet, los tornillos necesarios para el anclaje de los discos duros, un adaptador de corriente, los típicos manuales de uso e instalación y el CD de drivers.
Y estas son las especificaciones del producto:
Como podemos observar un punto muy llamativo en lo referente al KD20 es su sorprendente diseño, jugando con el color gris y blanco dando por resultado un producto elegante y robusto. Cuenta con un procesador de doble núcleo y un 1GB de memoria NAND, 256 MB de RAM, gracias a estas características el NAS no tendrá ningún problema a la hora de ponerse en funcionamiento.
En esta imagen observamos el botón de encendido o apagado del dispositivo que para nada rompe con la estética del producto.
En su parte delantera nos encontramos con un puerto USB 3.0, una ranura para tarjetas SD y los Leds de indicadores. La incorporación de USB 3.0 es todo un acierto en los tiempos que corren, es más marca la diferencia entre un buen NAS y uno que no lo es.
Seguidamente en su parte trasera tenemos el resto de conexiones; la entrada de corriente, un pequeño interruptor de reset por si se queda bloqueado o realizamos algún ajuste erróneo, la entrada Ethernet y dos puertos USB 2.0
El lema del KD20, es el de poder crear tú mismo tu propia Nube en casa sin mucha dificultad, por lo que entendemos que podría estar mucho tiempo encendido, entonces las temperaturas juegan un papel fundamental. No obstante Shuttle ya había pensado en esto, por eso mismo encontramos una gran cantidad de rendijas de ventilación para evitar que los discos duros superen temperaturas muy altas.
Además en su parte trasera se incluye un ventilador inteligente que se regulará según la temperatura que tenga el interior del KD20. El ruido emitido por el mismo es casi imperceptible.
Si pulsamos el botón de la parte delantera veremos cómo se abre un mundo ante nuestros ojos. Encontramos las dos bahías donde irán los discos duros de 3.5”. En la parte superior aparecen los típicos botones de hot swap, es decir el poder sacar el disco duro sin necesidad de apagar el NAS. Esta funcionalidad resulta bastante eficiente, por ejemplo imaginemos que en ambas bahías están llenas un disco duro está transfiriendo datos(A) y el otro no (B), queremos sacar el que no realiza ninguna tarea (B) ¿Cómo lo hacemos?, pues gracias a ese botón podremos desconectarlo sin necesidad de apagar el equipo.
El único punto negativo que creo que es digno de ser mencionado, podría ser que para instalar los discos duros sea necesario el anclarlo con tornillos, en el mercado encontramos una gran cantidad de NAS con otros tipos de agarre para discos duros. No quiero decir con esto que el producto sea malo, todo lo contrario, solo que quizás el factor eficiencia-rapidez que dieron con la incorporación de una puerta y los botones hot swap, lo han perdido por tener que pararte X minutos para atornillar.
Los módulos de instalación del disco duro son de alta calidad, muy resistentes y sólidos.
Si le damos la vuelta comprobaremos como disponemos de dos patas de goma que evitaran cualquier movimiento brusco que pueda originarse.
Otro punto que quizás me resulte algo negativo, sea el led del botón de power, si es verdad que este led nos indicara en todo momento si el NAS está listo para apagarse o incluso cuando la señal no es limpia, pero si no tenemos la firme idea de dejar este aparato metido dentro de un armario o un lugar alejado de nuestra vida cotidiana, puede resultar agobiante el tener ese led todo día apuntándote a la cara.
En lo referente al software tenemos que decir que es fácil, extremadamente fácil de usar intuitivo y no ha tenido ningún problema durante las pruebas, quizás echamos de menos tener el idioma español en el panel de administración. No obstante felicitar a Shuttle por el Software, es más disponemos de una aplicación tanto para Android como para iOS, que nos permitirá acceder al NAS desde nuestro terminal.
Esta sería la primera pantalla que veríamos nada más conectarnos al NAS, nos pregunta qué tipo de configuración nos gustaría realizar, al tener un solo disco duro tan solo podemos acceder a la primera opción, no obstante si dispusiéramos más discos podríamos montar un sistema RAID 0, RAID 1 sin mucha dificultad.
Una vez vistos todos los aspectos técnicos llega la hora de las pruebas de rendimiento, hemos utilizado un solo disco duro, un WD Caviar Black 500GB a 7.200RPM.
En definitiva tenemos en nuestras manos un NAS de grandes características un precio cercano para todo el público 156€ aproximadamente, con una instalación y configuración tan fácil que el no saber informática no será excusa suficiente.
Sé breve en tus razonamientos, que ninguno hay gustoso si es largo